A propósito de lo manifestado por la Doctora Clarisa Ruíz Secretaria de Cultura, Recreación y Deporte, en la nota de prensa del Domingo con relación a qué tanto el Estadio y el Coliseo El Campín tienen los días contados, me permito poner de manifiesto que desde el año 2010 hasta la fecha, en esta Corporación y en mi calidad de concejal de la ciudad, he venido realizando debates de control político respecto al tema. Ejemplo de ello es la proposición 389 debatida el día 19 de enero de 2011, la cual apuntaba a demostrar la lamentable y deplorable situación de los coliseos del Distrito y en especial la precaria situación del Coliseo cubierto El Campín.

Por ello he estado insistiendo, que ante el estado de deterioro en que se encuentra el Coliseo Cubierto El Campin, lo mejor es demoler este escenario y construir en el área comprendida entre las carreras 27 y 30 y las calles 58 y la 63, un complejo deportivo que incluya además de un escenario multipropósito moderno y seguro para mas de 30.000 personas como lo requiere la ciudad, un centro recreo deportivo, un centro de convenciones y exposiciones, además de oficinas, locales comerciales y un hotel.

Con relación a la demolición del Estadio Nemesio Camacho El Campín, considero que es mejor realizar nuevas intervenciones de obra para posicionarlo como un estadio mundialista, más si se tiene en cuenta que hace relativamente poco se le hizo una inversión por más 30.250 millones de pesos. Por ello es preferible convertir toda esa zona en un verdadero complejo cultural y deportivo, que con seguridad abrirá las puertas a atracciones musicales, deportivas y culturales de nivel mundial que hasta ahora han sido ajenas a los bogotanos.

Aunado a lo anterior, es necesario precisar que con el estudio y análisis que he realizado al Plan de Desarrollo radicado en el Concejo de Bogotá por la Administración Distrital, solicité incorporar dentro del proyecto “Cotidianidad Libre y Activa” como meta la Construcción del Complejo “Unidad Deportiva el Campín”, para que Bogotá cuente de una vez por todas con un lugar digno para ver espectáculos tanto deportivos como culturales y artísticos, convirtiéndose esta zona en un punto estratégico de desarrollo y turismo de la ciudad. Así las cosas, dejo por sentado que esta propuesta no es nueva y como ya lo he manifestado en diferentes ocasiones no se trata de quitarle un ícono a la ciudad porque sí, lo que pretendo es que los capitalinos cuenten con un complejo deportivo y un escenario multipropósito orgullo de Bogotá, moderno, amplio y seguro.