Bogotá finaliza 2016 sin avance en política social
El Concejal Celio Nieves Herrera hace un balance de la política social para Bogotá en 2016 y lo que vendrá en 2017 para avanzar en temas tan importantes como Educación, Desarrollo Económico, Cultura, Recreación y Deporte, Integración social, Mujeres y Ambiente.
El cabildante, expresa que no comparte lo aprobado en el Plan de Desarrollo de Peñalosa y por lo tanto tampoco está de acuerdo con los recursos que el Concejo de Bogotá aprobó para atender metas de corte privatizador con los activos estratégicos (Venta de Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá -ETB- y enajenación del 20% de Empresa de Energía de Bogotá -EEB-) que han generado cuantiosas sumas de dinero a las arcas públicas distritales, depredador con el ambiente desconociendo la importancia de la Reserva Van Der Hammen dejándola sin los recursos que requiere su plan de manejo ambiental y excluyente con las clases menos favorecidas de la Capital de la República.
El presupuesto para Bogotá 2017 propuesto por la Administración Peñalosa es el reflejo de los intereses políticos incorporados en el Plan de Desarrollo, esto se evidencia en que de los 18.8 billones de pesos, el 36% será para el Sector Movilidad, sin darle continuidad a la primera línea del Metro Subterráneo y teniendo como prioridad las troncales de Transmilenio, iniciando con la Troncal Carrera Séptima.
Para sectores tan importantes que permiten mejorar el bienestar de los ciudadanos tales como: Mujeres 0.2%, Desarrollo Económico 0.6%, Ambiente 1.1%, Cultura, recreación y deporte 3.5 % e Integración Social 5.8%. Las cifras evidencian que, para ninguno de estos sectores los recursos son mayores al 7% del total del presupuesto.
En materia de Educación, en primer lugar se fortalecen los colegios en concesión con apropiación de recursos por casi 1 billón de pesos a través de las vigencias futuras, desconociendo el avance que la ciudad ha tenido en la calidad de la Educación Pública; en segundo lugar, para el próximo año Bogotá no contará con recursos que permitan financiar algunos componentes que permiten continuar avanzando en un mejor servicio educativo público para los niños, niñas y jóvenes de la Capital de la República.
- Los más de 178 mil niños y niñas entre 3 y 5 años quedarán sin oportunidad de acceder a los grados Pre jardín, Jardín y Transición con permanencia, gratuidad e integralidad del proceso educativo, de conformidad con la legislación vigente. El preescolar de tres grados permite una educación temprana de calidad fundamental para el desarrollo social de la persona.
- Los colegios públicos distritales no contarán con recursos para integrar los equipos interdisciplinarios de orientación escolar que se requieren para desarrollar acciones que permitan llevar a cabo un adecuado proceso de orientación enfocado a tratar las problemáticas propias de la escuela, atendiendo de manera integral la comunidad educativa en temas tan importantes como: convivencia escolar, solución pacífica de conflictos, orientación vocacional y profesional.
- Los docentes del sector público oficial de Bogotá no contarán con la oportunidad de desarrollar proyectos de investigación e innovación en pedagogía y docencia, puesto que no se apropiaron los recursos para materializar el Acuerdo 613 de 2015 «Por el cual se establece como estímulo el año sabático para docentes y docentes directivos de la Planta de Personal de la Secretaría de Educación del Distrito”, el cual tiene como finalidad contribuir a la calidad de la educación en la Capital de la República.
- La capacidad de pago de los hogares bogotanos es una de las variables que abre las brechas en materia educativa. Sin embargo, parece no ser tan importante esta situación para la actual administración puesto que de los recursos destinados para 2017 no se evidencia cual será el avance de cobertura para continuar con la implementación del Acuerdo 571 de 2014 «Por medio del cual se establece la entrega de un Kit escolar gratuito para los estudiantes matriculados en las instituciones educativas oficiales del Distrito Capital». Teniendo en cuenta que el año pasado se destinaron recursos por 700.000 millones de pesos para beneficiar a 27.379 niños, niñas y jóvenes que por sus condiciones de vulnerabilidad no cuentan con recursos para tener los útiles escolares necesarios que permitan el correcto desarrollo de sus actividades académicas.
- Se queda sin recursos para 2017 la tarifa diferencial del 30% en el transporte público, de la cual deben ser beneficiados los estudiantes de instituciones educativas del Distrito Capital matriculados en los niveles de básica secundaria y media (grados 6º a 11º), estudiantes de las instituciones de educación superior (técnica, tecnológica y universitaria) de los estratos 1, 2 y 3 que residan a más de un kilómetro de distancia de la institución educativa. Dicha tarifa es un instrumento que permite disminuir las brechas sociales y fortalecer a las familias bogotanas con menores ingresos para que tengan acceso a otros bienes necesarios para el mejoramiento de la calidad de vida.
- La Universidad Distrital “Francisco José de Caldas”, se queda con recursos para inversión de tan solo 28.331 millones de pesos con una variación del -34,4% frente a lo apropiado para 2016. Esto quiere decir que para 2017 los jóvenes de estratos 1,2 y 3 tendrán reducidas posibilidades de acceder a la educación superior.
- Para el Sector Salud, la apropiación de recursos para 2017 muestra la inexistencia de un monto con destinación específica al saneamiento del déficit de la Red Pública Hospitalaria que asciende a 1 billón 34.000 millones de pesos, en segundo lugar, no se evidencian recursos para el cumplimiento de las metas en materia de prevención y promoción de la salud tema que ha quedado muy rezagado con la reorganización del sector a través del Acuerdo 641 de 2016. Por último, se espera que el presupuesto asignado para el próximo año impacte en la disminución de los problemas a los usuarios en cuanto a quejas por atención y demora en la asignación de citas y entrega de medicamentos.
- El sector Ambiente, es castigado severamente en el Plan Distrital de Desarrollo “Bogotá Mejor para Todos”, puesto que no se incluye a la Reserva Forestal Regional Productora del Norte de Bogotá “Thomas Van der Hammen” y no se destinan recursos para ejecutar los programas y proyectos formulados en el Plan de Manejo Ambiental (PMA), pese a que varias instituciones distritales son responsables de su ejecución al corto, mediano y largo plazo.
- En cuanto a la Franja de Adecuación de los Cerros Orientales y las acciones a implementar, el Distrito conjuntamente con el Ministerio de Ambiente y la CAR deben dar inicio a la recuperación de canteras, implementación de acciones de restauración ecológica, construcción de 19 parques ecológicos, compra de predios para que sean de uso público y la continuación en el mejoramiento de barrios de origen informal, entre otros, para lo cual se estima necesario contar con 50.000 millones de pesos, recursos que no se evidencian en el presupuesto para 2017 y que muy seguramente en este cuatrienio no tendrán esa prioridad.
- Para el caso del sector Mujer no se contemplan recursos para 2017 que garanticen oportunidades laborales en condición de igualdad y sin ningún tipo de discriminación, que permita a las mujeres bogotanas un mejor posicionamiento económico contribuyendo a su empoderamiento y a la disminución de las brechas salariales entre hombres y mujeres factor que ha sido determinante para la profundización de las inequidades de género.
- El sector Cultura, Recreación y Deporte no requiere solo canchas de fútbol sintéticas tal y como lo tiene previsto la Administración Peñalosa. Para garantizar el goce efectivo, gradual y progresivo de los derechos de los ciudadanos a la recreación, el deporte, la actividad física y al disfrute de los parques y escenarios, se debe dar continuidad a lo adoptado en el Decreto 229 de 2015 teniendo como prioridad acciones como: a) Participación comunitaria en el desarrollo de esta política, b) incremento del número de ciudadanos que tengan oportunidades del goce del deporte, la recreación y la actividad física en condiciones dignas y sin discriminación alguna teniendo en cuenta los diferentes grupos poblacionales que componen nuestra sociedad capitalina tales como: Las personas Mayores y las personas con discapacidad, c) Creación de condiciones a los deportistas de alto rendimiento posicionando a Bogotá como líder del deporte nacional e internacional. Otro punto que causa indignación con la Administración Peñalosa en cuanto al presupuesto para el 2017 para este sector, es que quedan embolatados los recursos para la sede propia de la Orquesta Filarmónica, dichos recursos se apropiaron desde la anterior administración y hoy tendrán otro destino. De igual forma, no se visibilizaron los recursos para la Cinemateca Distrital, es evidente que para el actual gobierno la cultura no merece los recursos adecuados.
- El Sector de Integración Social es uno de los sectores marginados en materia de recursos para 2017 con tan solo el 5.8% del total del presupuesto distrital atenderá necesidades tan importantes para los ciudadanos como la alimentación y el trato diferencial de grupos poblacionales como madres cabeza de familia, jóvenes en condición de vulnerabilidad, personas mayores y personas con discapacidad.
En cuanto a alimentación es preocupante que se disminuyan los recursos en 51.000 millones de pesos con respecto al año pasado, ya que lo que se requiere es un aumento en cobertura para atender esta necesidad en un mayor número de personas menos favorecidas. En cuanto a las personas mayores no se evidencian recursos que permitan mejorar los montos de los subsidios recibidos hoy por dicho grupo poblacional. Igualmente, no se contemplaron ni el en Plan de Desarrollo y mucho menos en el presupuesto recursos para el apoyo de oportunidades de generación de ingresos y ocupación del tiempo libre de las personas mayores.
Las acciones desarrolladas para contribuir a la disminución de los indicadores de pobreza y pobreza extrema han estado a cargo de este sector y es a este a quien sin duda se debe fortalecer tanto con acciones como con recursos importantes para continuar impactando positivamente en la calidad de vida de los bogotanos menos favorecidos.
13. Para el caso del Sector de Desarrollo Económico, la situación no es alentadora en materia de recursos para 2017, tan solo el 0.6% del total del presupuesto se aprobaron el mismo. Quedan inciertos recursos importantes para el fortalecimiento al primer empleo principalmente para los jóvenes que terminan la educación media y que no tienen opciones de educación, ni de generación de ingresos. Igualmente es incierta la política rural principalmente en cuanto a la participación del proceso de abastecimiento de las plazas de mercado, nuestros campesinos bogotanos sin una política de protección al mecanismo de intermediación en la venta de sus productos alimenticios agrícolas.
Lo que preocupa es el verdadero impacto del gasto social en la disminución de las brechas socio-económicas puesto que Bogotá requiere avanzar no solo en materia de infraestructura vial sino también en el acceso a servicios tan importantes como salud, educación, oportunidades laborales, y tratos diferenciales según las condiciones de los distintos grupos poblacionales que se encuentran en la Capital de la República.
Nieves Herrera, resalta el avance que entre 2005 y 2015 Bogotá tuvo en materia de disminución de la pobreza, un millón menos de pobres en la ciudad lo confirma. El indicador de pobreza disminuyó en 16.2 puntos porcentuales pasando de 26.6% a 10.4%. Esta significativa reducción es fruto de políticas sociales como los subsidios, acompañado de oportunidades de generación de ingresos y acceso a servicios de salud, alimentación y educación en condiciones dignas. Sin embargo la capital continúa siendo la más desigual del país.
Para el 2017, el Gobierno Peñalosa “proyecta” un Gasto Público Social del 70 % y teniendo en cuenta los impactos de dicho gasto se puede decir que es un presupuesto que presenta unas metas marginales dando cumplimiento apenas a lo establecido por la Ley. Sin embargo, continuaremos evidenciando las mismas problemáticas más acentuadas en población capitalina principalmente en la más vulnerable sin un impacto redistributivo en el ingreso de los hogares, mostrando regresividad en el gasto. En cuanto a la variación de los indicadores de pobreza, pobreza extrema, desnutrición y mortalidad infantil según las cifras que hoy tenemos, con los recursos asignados para atender las necesidades apremiantes de la población es claro que tampoco tendremos impactos de avance en esta materia.
Por último, el Concejal afirma que su compromiso con la ciudad es continuar trabajando desde el Concejo de Bogotá por la garantía de la continuidad de las políticas públicas que iniciaron su materialización desde el Gobierno de Lucho Garzón y que en los siguientes fueron fortalecidas. Igualmente, se continuará evaluando para 2017 tanto los impactos sociales como la distribución de los recursos aprobados para el gasto social de Bogotá.